El mejor lugar para vivir en el distrito de Poblenou es un lugar discreto que se ubica entre el ajetreo cotidiano de la Rambla de Poblenou, con todos sus comercios y terracitas, y las tranquilas callecitas blancas que dan a la plaza de Prim, lugar intemporal donde los de toda la vida se encuentran en el famoso restaurante Els Pescadors, y estiran ahí la tarde, cigarrillo en mano, contemplando como algunos transeuntes cruzan la plaza rumbo a la playa. Podría compararse a uno de esos paisajes blancos de alguna ciudad marroquí o de Cádiz, donde brilla el sol, abunda la luz, y los niños juegan a la pelota. Es un lugar donde durante unos instantes, el tiempo se para.

En este rincón, al cruce de la calle Taulat y de la calle Sant Francesc hemos decidido hacer unas viviendas que se mimetizan con su entorno, aprovechando la luz que entra a 3 vientos, y combinando piedras blancas con materiales naturales como la madera para dar calidez. Pronto daremos vida a tres apartamentos de 100 m2 y 3 habitaciones y una casa unifamiliar, como pocas se pueden encontrar en Barcelona. Que no falte el verde, y para ello nuestra arquitecta dibuja patios y arboles de manera que cada hogar tenga acceso a su propio jardín secreto, un verdadero oasis en medio de la ciudad.
Queremos con este proyecto crear hogares para familias que disfruten de la vida de barrio en este edificio pensado para parejas modernas, amantes de la sostenibilidad y que se enamoren como nosotros, de este maravilloso y tranquilo rincón a un paso del mar.